ATALAYA

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Una espadaña


La espadaña es una estructura mural que se prolonga verticalmente realizada en un muro, sobresaliendo del resto del campanil y acabada en pináculo.
 Puede disponer de uno o más vanos para albergar campanas, formando parte de algunas iglesias donde hace funciones de campanario o campanil, diferenciándose de estos en que su acceso no se alberga en el interior.
También se puede encontrar en otros tipos de construcciones, como la espadaña de la Puerta del Carmen en la muralla de Ávila, o en edificaciones civiles, como los conventos, o las iglesias antiguas. Estaban decoradas con escudos alegóricos.
Ya en el románico se daban en Europa estas estructuras, si bien se optaba en general por construcciones más complejas. tiene unos muros muy gruesos de piedra. 
Estos conventos recibían el nombre de convento Franciscano, por que en aquella época había una orden Franciscana.

Aquí nació Francisco de Zurbarán



Francisco de Zurbarán (Nacido en Fuente
de Cantos, el 7 de noviembre de 1598 y falleció en Madrid el 27 de agosto de 1664) fue un pintor del Siglo de Oro español.
Contemporáneo y amigo de Velázquez, Zurbarán destacó en la pintura religiosa,en la que su arte revela una gran fuerza visual y un profundo misticismo. Fue un artista representativo de la Contrarreforma. Influido en sus comienzos por Caravaggio, su estilo fue evolucionando para aproximarse a los maestros manieristas italianos. Sus representaciones se alejan del realismo de Velázquez y sus composiciones se caracterizan por un modelado claroscuro con tonos más ácidos.


Estas fotos son de la casa de Zurbarán, localizada en Fuente de Cantos, provincia de Badajoz. 
Esta casa está en mal estado, por que como podéis ver, la fachada la están reformando; aunque por dentro yo no sé cómo estará, pero si por fuera esta así me imagino que por dentro estará aun peor, ya que ha estado tantos años sin habitarla nadie ni reformarla.

 


Esta es la fachada de la casa de Zurbarán en la actualidad.
En la placa pone: "En esta casa nació Francisco de Zurbarán,
pincel de sombras y luces que supo ganar
las cumbres de la fama universal". Esta imagen
fue realizada en Fuente de Cantos.




Murallas de Zafra: La estatua de Santiago Matamoros



MURALLAS DE ZAFRA

El casco antiguo de la muralla medía unos 630 metros desde la Puerta de Sevilla hasta la Puerta del Cubo, y 562 metros desde la puerta de Los Santos a la puerta de Jerez. A lo largo de la muralla se erigieron cuatro puertas coetáneas a su construcción: al norte quedó la Puerta de Badajoz o del Cubo, al sur la de Sevilla, al oeste la de Jerez y al este la de Los Santos. A éstas habría que añadir una más: la del Palacio situada al sudeste que daba servicio al Alcázar. Don Lorenzo Suarez de Figueroa empieza poco a poco a hacer de Zafra el centro del Señorío de Feria. Continuó la construcción de la muralla, empezada a construir por su padre, la cual tenía como función tanto la defensa como la fiscalización de los vecinos, comerciantes y viajeros; la construcción duró desde 1426 hasta 1449. También en 1437 mandó construir uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, el Alcázar, el cual sería su residencia.





PUERTA DE BADAJOZ

Esta puerta presenta una tipología extraña y de duda consistente en una torre semicircular con un portón en un lateral, por lo que para atravesara era necesario realizar un ángulo recto dentro de la misma torre, resultando en una puerta indirecta. El resto de las puertas presenta una tipología diferente, entrada directa flanqueada por dos torres. Esta puerta tenia dos nombres muy conocidos, la puerta del Cubo por un elevado torreón que la defiende o la puerta de Badajoz. Se cree que fue construido después de la muralla porque está adosada a ella sin enlace ni trabazón alguna. Se construyó así para evitar que batida la torre se aportillase la muralla. De esta manera, aunque se cayese la torre el muro de la muralla permanecería intacto. En esta puerta norte confluían los caminos de Badajoz (ciudad controlada por los Suarez de Figueroa), los de Feria y Fuente del Maestre; y a través de ellos los del resto de las villas y aldeas del Estado señorial. Dentro del Torreón, los oficiales señoriales o concejiles tendrían alguna especie de oficina de control y recaudación de todo lo que se mercadeaba a través de las vías que allí confluían. En el Torreón aparece la escultura de Santiago Matamoros que está por la relación del Señorío de Feria y la Orden de Santiago. La entrada de carromatos o vehículos de tiro animal sería muy difícil, ya que precisaría de rebajes en las esquinas.

LA PUERTA DE SEVILLA

Era la principal y de más tránsito. Estaba formada por tierra berroqueña, siendo grande y alta con basamentos para columnas estriadas y cornisamentos romanos. La puerta daba a la Calle Sevilla y en el otro extremo al Campo de Sevilla. Estaba también coronada en su parte superior por una pequeña ermita o capilla. En ella se veneraba una pesada imagen de la Virgen realizada en fuste de una columna llamada Nuestra Señora de la Aurora.





LA PUERTA DE LA CALLE JEREZ

La Puerta de Jerez, que hoy se conserva perfectamente, da inicio a la Calle Jerez, que tiene su principio en el zoco medieval de la Plaza Chica. Apoyada sobre el doble arco ojival de sillería del conjunto de la puerta se encuentra la Capilla del Cristo de la Humildad y Paciencia, conocida en el siglo XV como Capilla de Nuestra Señora de la Caridad. En su interior, y sobre dos alturas distintas, se encuentran las dos imágenes que dan nombre a este lugar: la imagen de Cristo de la Humildad y la de la Virgen de la Caridad. La Puerta de Jerez por su parte exterior tiene un bello arco ojival, balcón central superior con dos hornacinas a cada lado y todo ello coronado por una airosa espadaña hecha de simple ladrillo. En este campanario se nos muestra el símbolo de la Villa que era el jarrón de las azucenas con los escudos de la Casa de Feria (un poco deteriorados durante la ocupación francesa).

LA PUERTA DE LOS SANTOS

Esta es la puerta situada al este, que da al único itinerario viable entre Zafra y Los Santos, empinado y arduo sendero que, saliendo desde el terreno junto al Convento de San Benito y a su altiva Torre de San Francisco, remontaba la Sierra y se adentraba en aquella población por la Calle llamada De Zafra. Estaba situada en la confluencia de las calles López Asuna y la entrada del Pilar Redondo; y flanqueada por dos torreones de buena planta, teniendo sobre el Arco de la entrada una Capilla de Nuestra Señora de la Concepción y Amparo, a semejanza de las existentes en las puertas de Sevilla y de Jerez.

PUERTA DEL CASTILLO.



De lo hasta aquí expuesto puede sacarse una hipótesis lógica. La muralla de Zafra comenzó a construirse por la Puerta de Badajoz y se siguió con los lienzos de muralla hacia las puertas de los Santos y de Jerez, que por su similitud no debieron llevarse mucho tiempo.





SANTIAGO MATAMOROS


Santiago Matamoros es el nombre que se da a la representación iconográfica del apóstol Santiago el Mayor cuando se le representa tal como se le describe en las crónicas medievales, según las cuales intervino milagrosamente en favor de los cristianos contra los musulmanes durante la Batalla de Clavijo (23 de mayo del año 844). La tradición del Matamoros, origen del antiguo linaje, se remonta al reinado de Ramiro I (muerto en 850) que sucedió en el trono de Galicia, Asturias y León a su tío Alfonso el Casto (muerto en 842). Al fallecer su tío, los moros reclamaron el tributo de las cien doncellas (cincuenta hidalgas y cincuenta plebeyas) que tenían impuesto a los reinos cristianos del norte. Ramiro I, que estaba en Bardulia (antiguo nombre de Castilla la Vieja), no quiso entregarles las cien doncellas y se encontró frente a frente con la morisma en Clavijo donde en la víspera de la batalla, según la tradición, se le aparece en sueños el Apóstol Santiago. Santiago le comunica que ha sido designado por Dios como Patrón de las Españas. Santiago anima a Ramiro al combate y le pide que lo invoque. Los españoles dan batalla al grito de "¡Dios ayuda a Santiago!", y los moros son vencidos, matando más de cinco mil moros en aquella jornada. Esta batalla da origen a la fundación de la Orden de Santiago.








Una Fibula Visigoda aquiliforme de Extremadura


La Fíbula visigoda aquiliforme, o Fíbula aquiliforme basilical de Alovera, es un broche o imperdible de oro. Era tan valioso que solo lo usaban los griegos y romanos, también es una joya o adorno personal muy valioso que se sujeta a una prenda de vestir o utilizado para unir la vestimenta. 
Esto era una gran obra de los orfebres de la Hispania visigoda. 
El cuerpo está conformado por una serie de cabujones o vidrios elaborados en una lámina de bronce, en los que se han insertado colores, como el granates, la pasta blanca y tambien la pasta vítrea de color azul. 
Es una pareja de fíbulas de águila, chapadas de oro en placas cinceladas y sujetas al bronce mediante clavillos. En el centro del umbo y en los ojos, almandinos redondos incrustados. Reversos con enganches incompletos, aunque con anilla supletoria, que en cada caso es una hebilla.
Hubo una época de varios enterramientos de poderosos reyes que en sus vestimentas llevaban estos objetos.



                         

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Santa Lucia del Trampal


  
Planta de Santa Lucía del Trampal
Planta, original y actual, de la ermita
De Santa Lucía del Trampal.
A tres kilómetros de Alcuéscar (Cáreres), se localiza la iglesia de Santa Lucía del Trampal. Era un templo basilical de un monasterio desaparecido, situado en este lugar.
Posiblemente, este sea el único monumento de época visigoda que se conserva en pie en el sur de la península.

Fue descubierta como edificio singular por D. Vélez Sánchez en 1974, pero por desgracia no se le dio la importancia que merecía. Posteriormente, en 1980, gracias a la perseverancia de D. Juan Rosco y de Doña Luisa Téllez este monumento fue considerado como tal y se procedió a su estudio, valoración y restauración.

Se edificó sobre antiguas construcciones romanas, posiblemente templos, de los que se utilizaron muchos de sus sillares. Algunos de ellos, mantienen inscripciones romanas referentes a divinidades, en especial a Ataecina, diosa celtíbera.
Se diseñó y construyó bajo un mismo proyecto, esto es, las modificaciones que se observan ahora fueron muy posteriores, una vez terminado su concepción primitiva. Su clasificación dentro del arte prerrománico es problemática. Aceptada como construcción hispano visigoda en un principio, actualmente, D. Luís y D. Fernando Sáez la identifican como mozárabe, interpretando los últimos descubrimientos y excavaciones.

La planta
En su diseño original se observa una distribución en tres naves, muy estrechas, es especial las laterales, separadas por pilares. Hoy estos pilares han desaparecido, pero en la restauración se indica su arranque con unos sillares. Dividían las naves en cuatro sectores.

La nave central culmina en el coro, pequeño espacio separado con canceles, que da paso al crucero con tres ábsides independientes. Detrás de esta nave y tras el coro, se ubica el ábside central.

Las naves laterales terminan en un muro a la altura del coro, con lo que no tienen ninguna vista ni acceso directo a los ábsides.

El comentado crucero, también estrecho, da acceso a los ábsides y es excedente a ellos. Está compuesto de siete tramos, uno central y tres a cada lado, separados por columnas que soportan arcos de herradura fajones. En sus laterales se abren dos puertas adinteladas, que actualmente comunican con al exterior y en origen, con unas las salas laterales. En sus extremos se abren dos ventanas con arco de herradura.

A los lados de las naves se ubicaban las típicas salas de adjuntas de iglesias hispanos visigodos. Se diseñaron tres a cada lado, con distintas funciones, algunas de ellas inciertas.
       El interior 
Actualmente se accede desde la entrada sur que da paso a la nave de la iglesia. La entrada norte está cerrada al paso.
Los tres ábsides tienen bóveda de cañón con sección de herradura. En sus frentes, se abren tres ventanas con arco de herradura, algo ensanchado y preparado para cierre. En el central quedan los restos de un altar de cinco pies y otros mobiliarios rocosos: mesas, bancos...
 En resumen, podemos casi asegurar, que la basílica, originalmente estaba cubierta con bóveda de piedra con arcos fajones, excepto en las cúpulas y en las naves que era de madera.


El exterior 
 En el siglo XV al cubrir con madera y reconvertir las tres naves a una sola, los muros, en su zona más elevada se rehicieron con sillarejo de diferente calidad.
 Se observa en las dos puertas de acceso, norte y sur, un arco superior incluido en el muro, con la función de aliviar fuerzas sobre el dintel.
 De las salas laterales solo se conserva, en su lado norte, un muro con una puerta con arco y las trazas restauradas del resto. Desde el exterior, se puede adivinar perfectamente las distintas salas interiores, en cada ábside se abre una ventana con un arco de herradura.
  



 








jueves, 1 de noviembre de 2012

El doblao



El doblao, desván, troje, buhardilla o también conocido como altillo, es una habitación en la parte superior de una vivienda disponible bajo el caballete del tejado. 

Normalmente se usa como trastero 
donde se guardan viejos objetos en 
inutilidad, también era donde 
antiguamente se guardaban las 
cosechas de trigo, grano, maíz y los 
aperos de trabajo en estas. Pero esa 
tradición se ha ido perdiendo cada vez 
más, hasta llegar a guardar las 
pertenencias o trastos que se han 
quedado en el recuerdo o han pasado 
de moda, aunque actualmente también 
se puede utilizar como estudio, sala o pequeño dormitorio. 

Éste se situaba en la parte superior de la casa, a la cual se accedía por una escalera. 
Por eso este blog se llama "El doblao de Luz María" por qué aunque a mí no me sirva para 
guardar las cosechas, me servirá para una gran recolecta de historias de Extremadura y de Zafra.